Big Data: El Petróleo del Mundo Actual

Actualmente se considera a los datos o Big Data el petróleo del siglo XXI. En otras palabras, es el activo más poderoso que tenemos. Tal y como con el petróleo, los que vean su gran valor y aprenden a extraerlo y utilizarlo de manera adecuada tendrán grandes recompensas. Vivimos en una era económicamente digitalizada en la que los datos son más importantes que nunca. Si los datos no fueran propiamente recopilados y gestionados, el progreso mundial se detendría. Si quieres aprenderlo todo sobre el Big Data, cómo utilizarlo y gestionarlo para cualquier empresa, no lo dudes y realiza un Máster en Big Data. En este post te ofrecemos una introducción al mundo de los datos, ¿quieres saber más? ¡continúa leyendo!

¿Qué es el Big Data?

El concepto Big Data engloba todo el gran conjunto de datos de mayor tamaño y más complejos que inundan el mundo actual. Todos estos datos tienen que ser analizados por las empresas para intentar obtener ideas que les permitan obtener mejores resultados. Debido al gran volumen de estos conjuntos de datos, los software de procesamiento convencionales no son capaces de gestionarlos. No obstante, estos grandes volúmenes de datos pueden analizarse y utilizarse para resolver problemas empresariales. Anteriormente, estos problemas no se hubieran podido solucionar sin la ayuda del Big Data.

¿Por qué se compara el Big Data con el petróleo?

The Economist  describe el Big Data como una nueva materia prima que genera una industria lucrativa y de rápido crecimiento, lo que provoca que los reguladores antimonopolio intervengan para frenar a quienes controlan su flujo. A pesar de que el Big Data o Inteligencia de Datos no es algo completamente nuevo, estos argumentos tienen mucha razón.

Actualmente, las empresas de datos como Facebook o Google podrán hacer algo similar a los antiguos petroleros. Estos últimos, sacaron y acumularon gran riqueza, estableciendo cuasi monopolios y construyendo la economía futura a partir de su propio recurso precioso. Debido a esto, con el petróleo del siglo XX se fue llegando a un consenso de que los reguladores debían intervenir y acabar con los oligopolios para evitar una concentración excesiva de poder. Muchos economistas han detectado paralelismos entre la acumulación del petróleo antiguamente con la acumulación de Big Data en la actualidad. A pesar de ellos, hay tres diferencias importantes que entre la industria de Big Data de hoy en día con la del petróleo.

Diferencia 1: La Oferta

El petróleo es una fuente de energía finita. A pesar de que todavía es abundante, no está asegurada su presencia de manera permanente. En cambio, los datos son virtualmente infinitos. Es por ello que la oferta de Big data es increíblemente abundante. Al contrario del petróleo, la preocupación de las empresas debería ser cómo utilizarla, no dónde encontrar más ni cómo compartirlo. Además, los datos pueden ser reutilizados, incluso por varias personas.

Este podría ser el caso de crear una cuenta de correo electrónico. Esta cuenta, a su vez, puede utilizarse para registrar a una persona en distintas redes sociales. En estas redes se pueden publicar fotografías o páginas web en las que esa persona comparta su gusto musical. Debido a esto, se deja una huella digital con los datos e información que podría ser beneficiosa para los motores de búsqueda. Justo lo contrario pasaría con el petróleo. Si una gran empresa toma el control del petróleo en cierta área, y este se acaba, nadie más podría beneficiarse.

Diferencia 2: El Control de la Mercancía

Existe cierto temor sobre el uso, y por tanto el abuso, del Big Data que encontramos en línea. No obstante, una gran cantidad de personas no son conscientes de la huella digital que dejan día a día en Internet. Si fuera al contrario, muchos de nosotros estaríamos obsesionados con la seguridad y protección. A pesar de ello, los datos son algo que, como usuarios, podemos controlar y propagar con nuestro consentimiento.

Volviendo al ejemplo de la dirección de correo electrónico, depende en gran parte del propietario de dicha cuenta entregar sus datos o información a ciertas páginas o servicios online. Sin embargo, la gente no siente que tiene el control de sus datos en línea, ni tampoco sabe cómo recuperarlos. Si se pretende borrar todos los datos e información que se ha dejado atrás sería un proceso muy lento. Y a pesar de ello, seguramente no se lograría por completo.

Diferencia 3: La Velocidad

La última diferencia es que la industria del Big Data evoluciona muchísimo más rápido que la petrolera. Las empresas de Datos necesitan innovar constantemente. Debido a la constante necesidad de adaptación, la regulación de estas empresas es bastante difícil. Esto no quiere decir que no deban ser reguladas, sino que su regulación es algo que no se ha resuelto de momento.

De hecho, es por esta necesidad de regulación que deberían cuestionarse afirmaciones como que “Los datos son el nuevo petróleo”. Por un lado, el petróleo supuso el suministro de abundante materia prima para la economía industrial. Por otro, el Big Data es un recurso incluso más abundante para la economía postindustrial. A pesar de sus parecidos con el petróleo, el Big Data es cada vez más controlado y redefinido por las compañías de datos con el fin de conseguir el control del dominio público.

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